Las Drogas Psicodelicas

 

 Las drogas psicodélicas, como el LSD, LSA, DMT y todo tipo de hongos, semillas y marihuana, tienen un propósito y una finalidad: ayudar a personas que tienen dificultades para acceder al mundo espiritual. Lamentablemente, los gobiernos nos han dicho que esto es malo, por lo que desde muy jóvenes nos han inculcado un miedo a consumir estas sustancias. Incluso antes de probarlas, decíamos que eran malas. Yo también era uno de ellos, hasta hace unos meses cuando descubrí y consumí algunas sustancias. Esto me permitió abrir mi mente, corazón y establecer un vínculo con la naturaleza.

¿Por qué estas drogas hacen daño a algunas personas? Porque cuando las consumen, todavía tienen rencores, odios y miedos en su cuerpo que, si no pueden controlar, se hacen daño a sí mismos. Por eso, aconsejo que, si eres nuevo en esto, lo hagas con alguien preparado o que ya haya consumido para que te oriente. No tengas miedo, pero no consumas solo si eres novato. Consume estas sustancias para interiorizar, filosofar, conversar con la naturaleza, observar el mundo espiritual y ver el mundo mágico de la imaginación, las formas, las luces y los colores.

Esta semana volví a consumir unas semillas que te llevan a tu pasado o niñez. Escarban en lo más profundo de ti, sacan a la luz todos tus recuerdos alojados en tu subconsciente, aunque parecen olvidados, y son esos recuerdos los que te impiden ser libre. Son esos recuerdos los que te atormentan y no sabes por qué eres así o por qué te sucede esto o aquello. Incluso, algunos de esos recuerdos pueden causarte enfermedades, y solo sacándolos a la luz te sanarás.

Llega un momento del viaje en el que me olvidé de mí mismo. No encontraba el camino de regreso a casa, pero incluso si te preocupas y te pierdes, aún puedes disfrutar. Pero si te olvidas de todo, aun pensando que no regresarás nunca, disfrutas, y a la larga regresas. Siempre vuelves.

De mi parte, gracias, naturaleza, por producir estas sustancias.