El Origen del Ser a donde vamos

En el inicio, no éramos nada ni nadie. Salimos como una explosión, fuimos aproximadamente 100 millones de seres compitiendo por llegar al otro lado. No podemos vivir solos, así que necesitamos a nuestra otra mitad para alcanzar otro nivel de vida. De los 100 millones, solo uno tiene el privilegio de pasar al otro lado. Nace el tiempo y el espacio, nos queda poco tiempo de vida y un largo camino por recorrer. No hay bien ni mal. La lucha por la vida está por encima de todo, la competencia es feroz. No tenemos sexo y al final uno llega.

¿Quién llega? Tú o yo? ¿Llega otro después de la unión de los dos seres o la conciencia o el ser?

Una vez dentro, nos uniremos con nuestra otra mitad y ese será nuestro hogar por los próximos 9 meses. Es un lugar seguro, no necesitamos respirar ni comer. Hay un ser más grande que nos proporciona todo, es agradable y suave. Este es el Paraíso. Ya no me interesa la vida pasada. ¿Qué pasa con los 999.999 demás? ¿Van al cielo o al infierno? No importa, yo estoy aquí, seguro y he llegado. Este es mi mundo y no lo cambiaría por nada. No hay bien ni mal, solo veo un todo lleno de amor.

Sin embargo, mi hogar se vuelve cada vez más estrecho y tengo que salir a pesar de no querer. Dicen que más allá hay otra vida, creencias, dioses, el bien y el mal, la sabiduría. Pero yo quiero quedarme en este paraíso, ¿para qué ir más allá si tengo todo aquí?

Hay un ser más poderoso que yo y me empuja hacia afuera. Veo una luz muy fuerte. No quiero morir, pero la fuerza es más grande que yo y salgo hacia la luz. Siento un golpe en mis nalgas y comienzo a llorar. Hoy tengo que respirar yo mismo, mi fuente de alimentación fue cortada. ¿Qué pasa? ¿Dónde estoy?

Soy una hoja en blanco, no conozco nada de este mundo. A medida que pasan los años, aprendo muchas cosas, pero mi hogar es cada vez más grande y hay muchos como yo. Algunos se quieren, otros se odian, otros se matan, otros se aman.

Siempre soy el mismo, la consciencia que está dentro de mí no cambia con los años. Pero mi cuerpo cambia, se transforma. Puede ser fuerte y luego debilitarse, nada permanece igual. Quisiera que mi cuerpo fuera el mismo, pero no depende de mí, hay una fuerza superior que lo transforma. Quiero quedarme en este mundo por mucho tiempo, pero sé que algún día tendré que partir.

No sé qué me espera en el más allá. Dicen que hay un Dios, un espíritu, otras vidas. Se escuchan muchas cosas, pero nadie sabe nada con certeza, porque nadie ha regresado para contar lo que hay allí.

Antes de ser parte de los 100 millones como yo, no existía, no era nadie. No sabía que había un mundo como este. Tal vez regrese a esa nada.

Vine de la nada y a la nada voy. Echaré de menos este mundo, pero no creo que haya alguien que lo eche de menos, porque yo ya no estaré aquí.

Por: Soy Nadie.